Viendo los pasteles, deseándolos, y quizás Lambo-san se coma uno!

Andaba por las calles de MimaMori, con esa típica sonrisa infantil y con intenciones poderosas. Sus pasos eran saltitos infantiles que terminaban en un juego de no pisar las líneas de la cerámica.

-¡Lambo-san ganara! –Saltaba y saltaba, llegando al centro del cuadrado, y como era pequeño cavia perfectamente- Lambo-san es un ganador, por eso Reborn lo pateo de la casa de mamá! –Lo decía como si no fuera nada, después de todo estaba acostumbrado- Jiajajaj!...

Sintió el olor de la masa de los pasteles haciéndose recién, ladeo el rostro y una deslumbrante y traviesa sonrisa le cruzo el rostro, corriendo hacia el ventanal de la pastelería.

-¡Lambo-san quiere pasteles, damone! –Exigió como si alguien le escuchase-

Estaba dando un paseo sola por “Toda” la ciudad mirando tienda por tienda, luego de un rato cuando ya comenzo a sentirse canzada miro al cartel de una pasteleria y entro a la pasteleria,miro todo el lugar y luego vio a Lambo y se acerco lentamente a el.

-Lambo!-intento llamar su atención mientras se acercaba cada vez mas, le miro y le sonrío un poco y luego se dedico a mirar los pasteles.

¡Ahhhh I-Pin, damone! –Dio un leve salto y sonrió todo poderoso. Luego hizo lo mismo, miro el ventanal donde mostraban todos aquellos pasteles que se le hacían agua a la boca a Lambo-
-¡oye I-pin, cómprame un pastel, damone! Como el poderoso aquí, te lo mando! –le apunto, llevándose una mano a su estomago- Me ruge me rugee argg!!! Damone!

-saco un poco de dinero de su bolsillo y luego miro a Lambo y se acerco a una señora pidiendo un trozo de pastel que tenia una frutilla en medio del trozo de pastel, se lo entregaron y volvió a mirar a Lambo- Lambo ven!-salio rápidamente de la tienda y se sentó en una banquita,partio el pastel por la mitad con una cuchilla que le habían dado y espero a Lambo para darle una mitad mientras ella se comía la otra-Lambo apresurate o I-pin no te dara!

-Ahh!!! -Babeaba por los pasteles que se le habian mostrado al frente, vio a I-pin y se acerco a ella con rapidez y comenzo a saltar al rededor de ella- ¡Lambo-san quiere pastel!! Lambo-san quiere pastel!!! -gritaba mientras agitaba los brazos-

Espero que i-pin estuviera media distraida por sus gritos y le quito el pastel de forma rapida y luego comenzo a huir.

-Jajaja! nunca atraparas a Lambo-san!

-Lambo espera que I-pin te dará un poco -le miro desconcentrándose un poco y antes que se diera cuenta sus pasteles ya no estaban y vio a Lambo correr con ellos.

-Lambo!! De vuelve ese pastel a I-pin o I-pin al recuperarlos no te dara nada!-gritaba mientras corría persiguiéndolo sin detenerse ni por un segundo y recuperar lo que era de ella-

¡Ajajajaja! Lambo-san no te dará, ya que estos pasteles fueron hechos especialmente para Lambo-san! –Corría como un niño chico, aunque lo era. Sonreía animado, esquivando las piernas de las personas que se le ponían por delante. Tenía el pastel de I-pin elevado hasta arriba, sujeto en la palma de su mano-

-¿Por qué te los daría, damone?! Lambo-san solo los quiere para el, jiajaiajia! –Seguía corriendo-

Corrio lo mas rapido que pudo hasta pasar a Lambo y se detuvo para quedar frente el,se detuvo y le miro usando su Gyoza Kempo-Gyoza..Kempo!-grito usando su ataque contra lambo para intentar de recuperar sus pasteles y al momento que estos calleron los atrapo rapidamente antes de que calleran al suelo.
-I-pin no le dara a Lambo!-dijo mordiendo el pastel.

-Removiéndose por todos lados, gracias al poder que le hizo la otra hacia el-Gyaaaaaa!!!!! –Chillo, mientras sus ojos se aguaban de forma rápida- ¡Son de lambo-san, damone! –Aun en el aire, moviéndose y chocando con las cosas. Sus ojos se volvieron remolinos, a si de mareados y el afro lo tenía desarmado. Y gracias a aquellos topones hacían que varias cosas cayeran de su afro: Dulces de I-pin, de Fuuta y varias cosas más.

Miro como las otras cosas caían y rápidamente las alcanzo a atrapar todas y se alejo de Lambo un poco comiéndose el pastel el cual debería haber comportado con el chico pero por su actitud decidió comérselo todo .Volteo para mirar al chico y se sentó algo cerca de el aun sin poder terminar de comerse el pastel.

-Lambo! I-pin te guardo un poco de pastel –se había arrepentido de comerse todo el pastel ella sola así que le dejo un poco de pastel a un lado para que el se lo comiera pero no era demasiado,era un pequeño trozo.

Cuando ya el poder mental acabo, cayo rendido al suelo y con el semblante bastante derrotado, recordaba varias cosas que su mente de niño chico podría albergar, pero siempre pasaban las mismas situaciones con su fiel amiga I-pin. Se arrastro un poco, soltando pequeños quejidos y a punto de llorar como un crio que era.

-L-lambo… san esta… -Decía con los ojos casi llorando, pero vio que su contraria le había dejado algo que comer, y rápidamente se alzo a este. Borrón y cuenta nueva, con el semblante bastante animado, y comiéndoselo de solo una mascada aquel dulce-